Un problema que puede empezar con la mamadera
La leche artificial tiene las mismas calorías que la leche materna. Visto así no tiene mucho sentido afirmar que una puede hacer más obesos a los niños, sin embargo una sale del pecho materno, del que hay que mamar para que salga, y la otra sale de una mamadera, del que no hay que hacer mucho esfuerzo para que caiga. De una nadie sabe cuánto sale y de la otra es fácil controlarlo.
Esto significa que son muchos los bebés que, en comparación, toman más leche artificial de la mamadera que la que tomarían si estuvieran mamando, simplemente porque como sigue cayendo, siguen tragando. El cuerpo no es tonto y tiene mecanismos para tratar de compensar un exceso de comida para evitar engordar demasiado, pero si un niño se acostumbra a comer mucho en cada toma podría suceder lo que se conoce coloquialmente como "hacérsele grande el estómago": el estómago permite cada vez más comida y la sensación de saciedad tarda más en llegar.